MISCELANIAS: Lee atentamente el texto que te presentamos a continuación, y responde con objetividad, no según lo que tu crees u opinas.
Desde la década de los cuarenta, es decir, casi cien años después de los geniales hallazgos de Pasteur y de Lister, la literatura científica comenzó a llenarse de comunicaciones provenientes de laboratorios de todo el mundo que demuestran la acción antibacteriana o el efecto antibiótico de muchas plantas superiores e inferiores. No es extraño que, ante tales noticias, aisladas del contexto general, se desarrollen suposiciones y teorías, a veces utópicas o descabelladas, sobre el uso de alguna de esas plantas para la curación o el control de una enfermedad causada por una infección bacteriana o viral, o por un desarreglo inmunológico o cromosómico.
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